Naturaleza Artica

LA BELLEZA DEL CIRCULO DORADO (De 3 a 4 Días)

Volamos para llegar a Reikiavik. Tras descubrir esta apacible ciudad, cogemos un coche de alquiler y nos lanzamos rumbo a lo desconocido. Nuestras primeras incursiones serán en el círculo dorado, un conjunto inenarrable de cataratas, manantiales termales, lagunas turquesas, géiseres y ruinas vikingas que se extienden entre Gullfos, Geysir y el parque nacional y Patrimonio de la Humanidad de Þingvellir. Este es uno de los enclaves más turísticos del país. Esto es ebido a su extraordinaria belleza creada por los continuos movimientos de la placa tectónica que separa Norteamérica de Europa. También fue la sede de uno de los parlamentos más antiguos del mundo. Hace más de 1000 años los vikingos se reunían en este bello enclave natural para debatir sobre las decisiones de la isla.

RECORRIENDO LA ISLA (De 5 a 7 Días)

Comenzamos la travesía alrededor de toda la isla recorriendo la carretera circular que la circunvala. El trayecto es impresionante a cada kilómetro que recorremos, con paisajes cambiantes cada hora: de suaves colinas musgosas pasamos a glaciares que se confunden entre la bruma, tundra ártica o las omnipresentes cataratas como la fotogénica Skogafoss, uno de los reclamos turísticos del país. Otra de las grandes atracciones de esta primera parte es en el parque nacional de Vatnajökull (antes Skaftafell), un conjunto de glaciares rodeados de picos nevados donde, en esta época del año, se puede observar perfectamente como los glaciares desembocan hasta el mar en la laguna de Jökulsárlón. Espectáculo de icebergs tan cercanos que se podrían tocar con la mano. Aprovecharemos para realizar algún paseo organizado por alguno de estos glaciares y descubrir la belleza de los hielos islandeses, con sus grietas y sus sobrecogedoras cuevas de hielo.

Algo más al norte, en los alrededores de Seyðisfjörður podremos disfrutar de los denominados fiordos del este, donde la carretera serpentea por los antiguos valles glaciares hoy cubiertos por el mar. Allí, las cascadas provenientes de los glaciares forman una cortina que cubre los escarpados acantilados, mientras en el interior se pueden contemplar aisladas granjas y renos pastando apaciblemente por las praderas.

ACARICIANDO EL CIRCULO POLAR ARTICO (De 6 a 8 Días)

Llegamos a la zona norte de la isla, la más aislada y remota, sobre todo en invierno cuando la nieve cubre esta región durante varios meses al año. Pero esta región tan cercana al círculo polar ártico esconde alguna de las sorpresas naturales más bellas de Islandia como la cascada Detifoss, una de las más impresionantes del país. Y decir eso de un país como Islandia es mucho decir…

En los alrededores del lago Mývatn podremos disfrutar de la espectacular actividad volcánica. Fumarolas, géiseres y lodos burbujeantes consiguen derretir la nieve en estos parajes, ofreciéndonos un paisaje mágico y lunar, que hará las delicias de los aficionados a la fotografía.  

Una espectacular carretera nos llevará desde el lago hasta la agradable población pesquera de Husavik, donde podremos embarcarnos para tratar de ver ballenas, abundantes en estas aguas tan frías.

Poco a poco emprenderemos el camino de regreso, contemplando maravillas como la cascada de Godafoss, de gran simbología en el país ya que se supone que desde lo alto de la cascada arrojaron a los antiguos dioses de la antigüedad cuando el país adoptó el cristianismo como religión.

Antes de marcharnos aprovecharemos la ocasión de sumergirnos en las aguas de la Laguna Azul, el conocido spa natural de Islandia, que nos dejará en el avión de regreso a casa, totalmente relajados y con la agradable sensación de haber descubierto un país único en el mundo.