Ruta Paraíso en el Índico

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Paraíso en el Indico

Seychelles es un archipiélago perdido en mitad del Océano Índico cuyos paisajes son simplemente increíbles. Para algunos no es más que un paraíso donde tumbarse en playas inimaginables, para nosotros, sin embargo, es un lugar para explorar y disfrutar al máximo.

En este viaje por Seychelles desafiaremos la gravedad en tirolina, recorreremos parques naturales, descubriremos los corales de los fondos marinos haciendo esnórquel o submarinismo, nos moveremos en bicicleta y podremos descansar en lsus playas.

Dificultad

En este viaje habrá

Mucho de Playa

Poco de Naturaleza

Fauna

Calidad Alojamientos

70/100

Probabilidad Lluvias

50/100

Forma Física

50/100

Calor / Humedad

60/100

Precauciones de Salud

30/100

ITINERARIO

1

LLEGADA AL PARAISO (De 4 a 5 Días)

Aprovechamos nuestra llegada a Mahe para descansar del largo trayecto hasta Seychelles.

En Mahé nos sobran las opciones y tendremos que afinar bien a la hora de elegir qué hacer. Existen playas de postal como la Beau Vallon Beach, donde podremos alquilar unos kayaks para explorar un poco más allá o, simplemente, pasear por su arenal ideal para el baño y rodeado de vegetación. Además, claro, es el lugar perfecto para sacar esas fotos típicas que también son trofeo del viaje.

Existen más playas en Mahé, en Intendance Beach podremos practicar surf si no somos muy expertos o seguir hasta Grand Anse si somos buenos nadadores.

Si queremos descansar o hacer tai-chi podemos acercarnos a Baie Lazare, donde las aguas son más calmadas. Además, si la marea está baja, podemos acercarnos andando hasta L'Islette y en Port Launay descubrir los fondos marinos repletos de corales con máscara y tubo.

Aunque será difícil cansarse de playas paradisiacas, también nos acercaremos al jardín botánico donde habitan unas tortugas gigantes que son endémicas de la zona o pasear por Victoria, la capital de la isla, y recorrer sus calles, entrando en sus tiendas de arte y artesanía.

Los amantes de la flora y fauna marina podrán visitar la flora y fauna de la Reserva marina de St.Anne donde podremos bucear si lo deseamos. Allí se encuentran tortugas, morenas, peces de múltiples colores y corales fabulosos.
2

SENDERISMO Y BAÑOS DE NATURALEZA (De 3 a 4 Días)

Aunque bien podríamos quedarnos a vivir en Mahé también queremos conocer otras partes de Seychelles. Por eso, tomamos un barco rápido y nos desplazamos hasta Praslin, donde nos sorprenderá la belleza del puerto de la Bahía de Santa Anna. En Praslin nos esperan más playas increíbles, Anse Lazio, por ejemplo para disfrutar haciendo esnórquel o paseando de un lado a otro de su arenal. En Praslin, además, tenemos la opción de andar por alguna de sus rutas bien señalizadas que suben a sus montañas frondosas. Desde allí, buscaremos miradores naturales que nos den una mejor perspectiva de la belleza del lugar.

Seguiremos aprovechando los días de vacaciones visitando el Valle de Mai, 'el corazón de Praslin', una de las junglas originales de las Seychelles que comúnmente se denomina 'el paraíso del edén'. Allí podremos admirar las plantas lodoiceas (el coco de mar) en un paraje natural declarado bien de la humanidad por la UNESCO en 1983.

Si no hemos tenido suficiente naturaleza para sentirnos conectados con la tierra aún nos queda por visitar la reserva natural Fond Ferdinand
3

ELIGIENDO LA MEJOR PLAYA DE SEYCHELLES (De 2 a 3 Días)

No queremos volver a casa sin dar un salto más a la cercana isla de La Digue donde será difícil elegir la playa más bonita del lugar. Por ejemplo Anse Source d’Argent, una de las playas más fotografiadas del mundo que, de hecho, cobra la friolera entrada de 10 €. Algunos viajeros dicen que merece la pena, otros que quizá no tanto.

La Digue es una isla que se puede recorrer en bicicleta y que hará las delicias de nuestros últimos días. Tiene playas fabulosas como Grand Anse, Petit Anse o Anse Cocos que podremos conectar simplemente andando. Los amantes de la fauna marina quizá tengan opción de ver tiburones de arrecife merodeando las playas y, por supuesto, existe otra reserva, la Reserva Veuve, que es famosa por sus aves y que también podremos visitar.

Aunque nos gustaría quedarnos para siempre, hay que volver a casa. Sin embargo, lo hacemos muy agradecidos por los días que hemos pasado y por haber marcado Seychelles en nuestro pasaporte. Una muesca más en nuestro historial viajero.