Buscando auroras boreales

Aterrizamos en la capital sueca y dejaremos sus encantos para el final del viaje. Lo primero que haremos será tomar un tren nocturno en busca del círculo Polar. Comenzaremos a sumergirnos, conforme cae la noche, en la profundidad de La Laponia Sueca, hasta llegar a la localidad de Lulea.

Nos disponemos a comenzar un recorrido en coche para cruzar la mágica línea imaginaria del círculo Polar ártico y aunque nuestro objetivo surge al caer la noche muchos rincones nos quedan por descubrir en las horas de sol.

Visitaremos el pintoresco pueblo-iglesia de Gammelstad, declarada patrimonio de la humanidad por su singularidad, antes de poner rumbo a Ardvisjaur. Nuestro recorrido irá profundizando por Laponia Sueca descubriendo localidades como Gallivare, Jokkmokk incluso acercarnos a la localidad vikinga de Kvikkjokk. Todo este recorrido nos ayudará a ir descubriendo la cultura del pueblo Sami en estado puro. Aprovechando que no viajamos en la noche ártica y los días tienen horas de luz, nos acercaremos a descubrir el Parque Natural del Stora Sjofallet el cual nos mostrará el contraste de la estación en estado puro. Tras más de tres días de Roadtrip por Laponia, llegaremos a la localidad más importante al norte de Suecia, Kiruna, a tan solo 145 Km del Polo Norte.

Emplearemos como base para seguir explorando Laponia la localidad de Kiruna. En esta localidad hay cosas muy interesantes a descubrir como el hotel de Hielo de Jukkasjarvi, Nikkaluokta, el Centro Espacial Sueco (Esrange espace center), el centro de la cultura Sami o pasear por el parque nacional de Abisko y su imponente cañón, así como sus majestuosos paisajes de otoño y torrentes de agua.

 

¿Y al caer la tarde? Desde que comencemos nuestro roadtrip, cada tarde buscaremos los mejores lugares, apartado de las grandes ciudades en busca de la menor contaminación lumínica y la mejor calidad de cielo para aguardar la aparición de la Auroras Boreales. Cada mañana consultaremos las fuentes meteorológicas para ir buscando esos lugares que nos brinden un cielo despejado en la noche. No será fácil cazarlas,…pero seguro que el intento merecerá la pena.

Nos despedimos de Laponia y ponemos rumbo a Estocolmo. Nos aguarda una preciosa ciudad con canales, que aguarda bajo la tierra una de las mas hermosas redes de metro del mundo. La belleza de Estocolmo no se entendería sin sus islas repletas de edificios históricos ni sus puentes que atraviesan los brazos de agua. A un lado, el lago Mälaren y al otro, el mar Báltico, y en cada rincón de sus históricas calle, acogedores cafés y restaurantes que te llaman a disfrutar de la vida sueca. Sin duda un aliciente para descubrir esta ciudad antes de poner rumbo a casa.